Para prevenir problemas de humedades y filtraciones debes evitar la salida de agua. Esta es una avería preocupante para cualquier dueño e inquilino y se debe reparar de manera rápida, pues puede causar problemas en el lugar donde se ubique.
Cuando la salida de agua se puede observar, es mucho más sencillo el arreglo; pero, las que ocurren con mayor incidencia son las que no se pueden visualizar. La salida de agua y en ocasiones, suele tardarse su detección. Solo nos damos cuenta por los daños que empezamos a observar.
En algunos casos, podemos ver el aumento significativo de la factura del gasto de agua, además aumenta el deterioro de los materiales involucrados.
Los fontaneros se valen de fórmulas para ubicar de forma certera las fugas de agua; lo más común que se presente en cuanto a filtraciones y humedad es por rompimiento o deterioro del sistema de saneamiento. Esto lo puedes constatar cuando consigues agua en el piso de la cocina, baño o lavadero y, en ocasiones la puedes conseguir por debajo del radiador.
Si quieres encontrar una salida de agua, los conocedores en la materia recomiendan: verificar que el marcador de agua se encuentre paralizado cuando se suspenda su salida a través de la llave de paso. De esta manera, verificarnos la presencia de salida de agua, pues el marcador seguirá funcionando.
Lo puedes ver rápidamente a través de las cisternas. Ve dentro del inodoro si está saliendo agua. De lo contrario coloca papel sanitario; si se humedece es porque hay salida de agua.
En caso que sea una tubería, se puede oír el paso de agua; existen métodos más actualizados para ubicar las fugas, son instrumentos de fácil manejo que detectan las fugas de agua que no se pueden visualizar a simple vista. Lo aplica personal especializado, de esta manera se previenen inconvenientes que pudieran sufrir los dueños, pues no tienen que romper una pared o levantar el piso.
Las siguientes son las diferentes maneras para ubicar la fuga; la más conocida es tratando de oírla a través de los extremos de la tubería y se mide su ubicación en relación con el tiempo que tarda en aparecer el ruido en los extremos de la tubería.
Existen unas cámaras termográficas que ubican la salida de agua cuando se perciben los cambios de temperatura. Se puede llenar la tubería con un gas trazador que puede localizar donde está la salida.
Por último, los geófonos indican la circulación y precisión del agua.